<
Google

martes, 5 de agosto de 2008

La política de las migajas

El proyecto de la nueva Constitución necesita del 50% de los votos más uno del universo de los sufragantes que bordea los 9,7 millones de ecuatorianos por lo cual el gobierno utilizará toda una maquinaria publicitaria y demagógica para lograr este objetivo.
Ya se ganó los votos de toda la UNE (Unión Nacional de Educadores) al otorgarles una jubilación de 30.000 dólares. El sector indígena respaldará al gobierno en el referéndum por haber introducido el kichwa y el shuar como idioma oficial para relaciones interculturales. Los movimientos gays votarán por el sí porque al aprobarse la nueva Constitución los homosexuales tendrán los mismos derechos que un matrimonio heterosexual al mantener una unión libre por un lapso de tiempo que será determinado en la ley.
Poco a poco el gobierno “satisfizo” y “satisfizará” las demandas de cada sector para que su propuesta sea la ganadora. Se sumarán los préstamos del IESS, más subsidios, más bonos, plan socio-vivienda, es decir, más medidas populistas. A cada uno le dará un caramelo bien dulce para que no apoyen al No y al Nulo.
El presidente Correa emprenderá una “política de las migajas” para contentar a todos con caramelitos para alcanzar el anhelado 50% más uno y, así evitar el debate y reflexión ciudadana sobre los grandes cambios introducidos en el sistema económico, estructura del poder, organismos de control, régimen de transición, etc. Algún día, el verdadero costo del populismo del siglo XXI será traslapado a toda la sociedad. Este populismo destrozará a la dolarización y se agregará un nuevo costo social a los ecuatorianos. Los ciudadanos deben profundamente razonar su voto y no inclinarse por las migajas ofrecidas. He indagado a algunas personas sobre su intención de voto y los que apoyan el SÍ mayoritariamente lo hacen por los caramelos y las migajas. Otro grupo a favor del SI, buscarán un nuevo representante de su revolución socialista en el periodo post-referéndum. Algunos, en cambio, no leerán absolutamente el proyecto propuesto y respaldarán al gobierno por sus aparentes buenas intenciones.
El nuevo marco jurídico a implantarse debería consolidar la democracia, las libertades, el Estado de Derecho e impulsar un verdadero desarrollo basado en productividad, ahorro y tecnologías.
En las próximas publicaciones se analizará la nueva Constitución y por qué la misma no cumplirá con las expectativas de la ciudadanía en el largo plazo. También como ésta puede resultar un arma muy peligrosa que al ser usada por un mandatario ansioso de poder podría consolidar la corrupción y una democracia ficticia.

<$BlogItemComentariosCount$> Comentarios:

At <$BlogComentariosDateTime$>, <$BlogComentariosAuthor$> said...

<$BlogCommentsBody$>

<$BlogCommDeleteIcon$>

Publicar un comentario

<< Home

© 2006 – 2009. Gaceta Económica Ecuador. Todos los derechos reservados.