<
Google

viernes, 21 de marzo de 2008

El control de los precios

Es muy común escuchar diariamente lo siguiente: ¡Los precios están subiendo!, ¡Nadie los controla!, ¿Por qué no interviene el gobierno?, ¡Manden a la cárcel a los especuladores! Todas estas frases son emitidas por periodistas, taxistas, políticos, ingenieros, amas de casa, incluso por algunos economistas trasnochados. Por ejemplo, los precios de los ingredientes para la elaboración de la fanesca sufren un ligero incremento de los precios mientras más se aproxime la celebración religiosa de la Semana Santa. ¿Por qué sucede este gran misterio que algunos no lo logran entender? Los precios están determinados con la relación que se da entre la oferta y la demanda y cuando hay más personas que requieren de una mercancía o bien (fréjol, choclo, palmito, garbanzo, pescado seco, etc.), ofrecen más por éste y el precio sube. El incremento se da en márgenes alcanzables ya que el producto es perecible. Los precios vuelven a su nivel normal cuando las expectativas de las personas vayan disminuyendo y aparezcan más ofertantes en el mercado de ingredientes para la fanesca. Este caso se lo puede aplicar a cada uno de los bienes y servicios que compiten en el mercado ecuatoriano. Actualmente, el precio del pan y del aceite está incrementándose debido a que sus principales materias primas están siendo utilizadas para la elaboración de combustibles no contaminantes. Así, una parte de la producción de soya se la envía a Estados Unidos para la producción de biocombustibles y mientras la demanda del aceite del mercado nacional no varíe (se mantenga constante) seguirá subiendo producto de la escasez. El precio del aceite comestible ha variado en casi un 100% en menos de 6 meses. También hay que agregarle la gran demanda de Asia de esta materia prima. La demanda del pan y del aceite por naturaleza es de tipo inelástica y hasta el momento lo sigue siendo. No podría afirmar con certeza si lo dejará de ser al ser un producto de primera necesidad, pero lo que sucedería en el corto plazo es una sustitución de una marca de aceite por otra cunado el consumidor compare los precios de los mismos. ¿Por qué el gobierno no debe intervenir en los precios? Muy sencillo, porque su injerencia producirá inevitablemente una escasez del producto en el mercado. El argumento para iniciar el control es que al precio actual solo los ricos pueden comprarla y los pobres no. Debido a que el precio está por debajo de su nivel natural, muchas personas comenzarán a demandar esta mercancía y se dará una reducción de la oferta (lo que está producido se va a agotar) y algunos empresarios marginales (con un costo de producción más alto) van a desaparecer. Los gobiernos que se autoproclaman de ser socialmente justos aplican una amplia gama de controles de precios cuyos efectos son socialmente nefastos. Sólo esperamos que el presidente Correa no adopte, a futuro, ningún tipo de “racionamiento” de la demanda (días de compras, cantidad máxima de compra por persona) con algunos de los productos que ya están bajo el control estatal.

Etiquetas: , ,

© 2006 – 2009. Gaceta Económica Ecuador. Todos los derechos reservados.